OSTEOPATIA Y OSTEOPATIA CRANEOSACRAL

Por: ENRIQUE MATEO
LA BOTIGA DE LA IAIA
Alicante


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OSTEOPATIA

Es una técnica de tratamiento natural que tiene la visión del ser humano en todo su conjunto, en el que todos sus componentes son interdependientes, huesos, músculos, fascias, órganos, vísceras, glándulas, piel, etc.

Dado que el cuerpo humano es un conjunto de estructuras en movimiento armonizadas entre sí, la osteopatía diagnostica y trata la enfermedad o lesión en base a la alteración de esta movilidad. Si una sola parte de este conjunto está afectada en su correcto funcionamiento, esta situación perturba al resto de la estructura provocando trastornos funcionales que desembocan en lesiones o patologías localizadas en otro punto, cercano o alejado de esta disfunción inicial.

El hombre tiende durante toda su vida a conservar su posición de pie, manteniendo un equilibrio vertical con respecto al suelo.

Esto provoca que el ser humano esté continuamente sometido a la agresión ejercida sobre él por líneas tensionales gravitatorias y rotacionales. Esta "lucha particular" ya de por sí suele ser suficiente para generar un estado lesional.

El osteópata observa el estado de salud como un estado en el que todo permanece en equilibrio, y el estado lesional o patológico como una consecuencia del desequilibrio corporal.

Es una terapia holística, concibe a la persona en su globalidad, y aunque se ocupa preferentemente del aspecto mecánico de la salud y de observar la movilidad corporal de la persona, también tiene en cuenta su estado emocional y el medio en que se desenvuelve, pues esto influye grandemente sobre el equilibrio del paciente.

OSTEOPATIA CRANEOSACRAL

Dentro del campo de la osteopatía existe una especialidad denominada Craneosacral que ocupa un papel muy importante dentro de la salud de la persona.

La forma en que están concebidas las suturas de los huesos craneales les permite deslizarse unos sobre otros. Este deslizamiento no es un movimiento en sí, sino más bien consiste en que las suturas craneales permiten micromovimientos de separación.

Se ha comprobado que en el cerebro y la médula espinal existe un movimiento propio (los neurocirujanos conocieron la existencia de este movimiento al realizar operaciones de médula espinal o del cerebro) que se manifiesta en la persona cuando todavía está en el seno materno, mucho antes de que los pulmones entren en funcionamiento. Este movimiento, que recibió el nombre de "Movimiento Respiratorio Primario" está íntimamente ligado a los micromovimientos que realizan los huesos craneales. Todo este sistema depende también del buen funcionamiento del hueso sacro, el cual efectúa un movimiento de oscilación entre los huesos ilíacos, como un péndulo, y está unido a la base craneal a través de la membrana meníngea (duramadre), por lo que es parte importante del sistema y que acompaña al movimiento de fluctuación o bombeo del líquido cefalorraquídeo (líquido que nutre el cerebro y que desciende por el canal dural, hasta relacionarse con el resto del organismo).

Por tanto, este movimiento es transmitido y queda reflejado en todos los tejidos y fluidos corporales del cuerpo humano.

Cualquier alteración funcional en la persona, o a nivel emocional, puede alterar todo este sistema.

Por ejemplo, en el proceso del nacimiento la cabeza del neonato sufre una adaptación para pasar por el canal pélvico de la madre. Esta deformación, que es transitoria y suele corregirse de manera natural, en ocasiones no lo hace, y esto puede crearnos muchos problemas en la edad adulta. Estos pueden producir procesos emocionales como ansiedad o depresión, o pueden reflejarse como problemas a nivel físico: dolores corporales, trastornos viscerales, migrañas, falta de concentración problemas de oídos, de la visión, deglución, etc.

La técnica de tratamiento es indolora y suele producir en la persona una profunda relajación.